
Fue registrado en el libro Guinness el matrimonio más largo del mundo. Llevan casados 85 años y los nietos, bisnietos, y tataranietos suman 110.
Liu Yung-yang y su esposa Yang Wan, naturales de Taiwán, recibieron el certificado del Libro Guiness de los Records por ser la pareja casada desde hace más tiempo. Derrocaron a una pareja estadounidense cuyo matrimonio duró 83 años. Liu Yung-yang, de 103 añitos y Yan Wan, de 102, recibieron el reconocimiento en su casa de Taoyuan por estar casados desde el año 1917. A la ceremonia de entrega del certificado de Récord Mundial asistieron cerca de 40 de los 110 nietos, bisnietos y tataranietos de la feliz pareja.
Según explicó la bisnieta de Liu, Ying-ju, el anciano trabajó en una granja hasta hace veinte años y goza de muy buena salud, salvo por una dificultad auditiva. Liu siempre trato a su esposa con ternura y la pareja nunca discutió en 85 años de matrimonio. Los enamorados se conocen desde que ella tenía 5 años cuando -según la tradición de las familias pobres taiwanesas- fue enviada a la casa de su futuro esposo para que empezara a cuidarlo y a llevar adelante las tareas domésticas de su hogar.
El matrimonio más corto.

La novia llegó puntual a bordo de un automóvil guiado por el amigo de su marido, vestida de color marfil fue recibida por el novio y por los invitados. Después del sí quiero, de las fotos de rigor y del lanzamiento de arroz, la novia pidió ir a cambiarse para estar más cómoda en el banquete y marchó acompañada por el amigo de su marido. El marido y los invitados fueron al restaurante, al cabo de una hora y sin que llegara la novia, empezaron a sospechar que algo no iba bien y comenzaron las llamadas al móvil de Sara. Estaba apagado.
Poco a poco "se fue creando un ambiente de funeral" en el restaurante, tras un par de llamadas al amigo del novio, al cabo de hora y medio respondió y pasó el teléfono a Sara: "Comprendí que cometí un error. Lo siento, mi corazón me lleva a otra parte", dijo al estupefacto marido.
La nueva pareja partió en viaje de luna de miel hacia Grecia, mientras que al marido no le quedó otra que quitarse el anillo y dirigirse a una abogado matrimonialista para conseguir, además del divorcio, resarcimiento por daños materiales y morales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario