viernes, 20 de enero de 2012

¿Por qué no hay Premio Nobel de Matemáticas?

En 1867 Alfred Bernhard Nobel inventó la dinamita, un explosivo plástico resultante de absorber la nitroglicerina en un material sólido poroso, con lo que se reducían los riesgos de accidente (las explosiones accidentales de la nitroglicerina, en una de las cuales había muerto su propio hermano Emilio Nobel y otras cuatro personas, habían despertado fuertes críticas contra Nobel y sus fábricas).

Nobel acumuló una enorme riqueza, pero también cierto complejo de culpa por el mal y la destrucción que sus inventos pudieran haber causado a la Humanidad en los campos de batalla. La combinación de ambas razones le llevó a legar la mayor parte de su fortuna a una sociedad filantrópica –La Fundación Nobel–, creada en 1900 con el encargo de otorgar una serie de premios anuales a las personas que más hubieran hecho en beneficio de la Humanidad. En su testamento Nobel instaura con su fortuna un fondo con el que se premiaría a los mejores exponentes en la Literatura, Fisiología o Medicina, Física, Química y la Paz. Y de esta forma se entregan los Premios Nobel cada 10 de diciembre de cada año por más de 100 años hasta ahora.

Pero ¿por qué no hay premio Nobel de Matemáticas?

El mito dice que Nobel preguntó a sus asesores si, en caso de crear un Premio Nobel en Matemáticas, Gösta Mittag-Leffer podría obtener dicho premio, y ellos le respondieron que sí era posible. Entonces el decidió no otorgar un premio al mejor aporte en matemáticas. ¿Qué había detrás de ello? Resulta que Mittag-Leffer al parecer tuvo una relación amorosa con la pareja sentimental de Nobel lo cual lo puso muy mal y es más, lo puso en contra de los matemáticos.

Este relato se contradice al comprobarse que Nobel no se había casado, esta decisión fue tomada por Nobel al ver que las matemáticas no eran prácticas en la vida (según él) evidentemente se equivocó en ese razonamiento ya que las Matemáticas son esenciales en nuestra vida. Pero Nobel no la consideró así y por ello no introdujo a esta ciencia en sus premios.

Pero los matemáticos no están exentos de premios específicos. Existe un premio “equivalente” al Nobel destinado a matemáticos: la medalla Fields, que se entrega cada cuatro años a uno o varios matemáticos sobresalientes, no mayores de 40 años de edad. Es el mayor galardón que puede recibir un matemático.

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