Ámsterdam una ciudad entre el cielo y el agua

La mágica Ciudad de Ámsterdam, combina sus extensos canales y numerosos puentes con la original arquitectura de los siglos XVI y XVII concentrados en una pequeña superficie. Las obras de famosos artistas como Rembrandt y Van Gogh se pueden admirar en los Museos de Ámsterdam, y caminando por la ciudad nos ofrece la historia viva de una de las más bellas y románticas de Europa.

U no de los rasgos distintivos de la capital holandesa son los atractivos canales que atraviesan la ciudad dándole un toque novelesco y exótico. El sistema de canales recibe el nombre de “Grachtengordel” y está formado por más de 160, los mismos que a su vez se encuentran atravesados por más de 1281 puentes. Si te preguntas en qué estado se encuentra el agua que recorre los canales, te cuento que Ámsterdam es muy meticulosa al respecto. Cada tres días el agua es renovada por medio de un innovador sistema, lo que hace que los canales no emanen olores fuertes. A su vez, está terminantemente prohibido bañarse en sus aguas y aún más: se multa a cualquier transeúnte que arroje residuos en el mismo.

Ubicada en plena bahía, se erige la imponente e importante Estación Central. Diseñada y construida a finales del siglo XIX. Al igual que la mayoría de grandes edificios de la ciudad, está apoyado en miles de pilares de madera, casi nueve mil. La entrada de la Estación Central está repleta de miles de bicicletas aparcadas. Es la primera vez que se ve un parking de pago sólo para bicicletas. Sólo en Ámsterdam hay 600.000 bicicletas.

Entre los museos se destacan grandes exponentes como El Rijksmuseum, El Museo de Van Gogh o La Casa de Ana Frank














Otro atractivo de los muchos con los que cuenta Ámsterdam, es ver sus originales barcos vivienda. Y es que aparte de la magnífica arquitectura civil de esta ciudad, podemos interesarnos por descubrir estas curiosas edificaciones que se disponen a lo largo de los canales. Existen más de dos mil quinientas casas barcaza, de diversos y múltiples estilos que las hacen a cada una de ellas, en cierta manera singular y diferente.

















El país entero ha mostrado dentro de toda su historia un espíritu de tolerancia y libertad. Tierra de asilo de muchos que encontraban en este país una vida tranquila y libre dónde poder desarrollar sus capacidades personales.

El consumo personal de marihuana está permitido, en los coffeeshops es posible comprar solo 5 gramos así como todos los utensilios para su consumo, el perfume de esa droga envuelve el aire de cafés, bares y calles de la ciudad. Verdadero paraíso para los bebedores de cerveza, en diferentes lugares como cafés antiguos o modernos, en la calle o a orillas de los canales, en la tarde luego de salir de sus lugares de trabajo, los habitantes de Ámsterdam se encuentran frente a una fresca y agradable cerveza.
Y por supuesto, no se debe olvidar que es la capital de los diamantes… quizás el mejor de los « souvenirs » aquí se tallan los diamantes a mano con los mejores expertos o bien en establecimientos industriales cuya actividad es enorme.

Ciudad enormemente bella, en ella se encontrarán el fantástico espectáculo de una ciudad que vive en el agua y que puede ofrecer tantas emociones, tanta belleza y tanta cordialidad de sus habitantes… ¡Una ciudad que vale la pena infinitamente visitar!